26.12.07

Sucedió en el 2007

Estrictamente faltan poco menos de cuatro días para que este año se vaya a la goma. Creo que nunca había deseado tanto que el calendario ya dé vuelta y empiece, como primer día de clases, con sus hojas nuevas llenas de expectativas. Pero antes de eso, creo que es un acto de justicia, de coherencia y de salud mental que diagnostique este 2007 como uno de los más duros de mi vida; donde todo ha sido ponerme a prueba. ¿Por qué? No podría dar una razón precisa: malas decisiones, hastío, necedad, estupidez, distracción, empecinamiento, voluntad, no abrir bien los ojos para apreciar las cosas que han estado allí siempre, cansancio. Depresión. Sí. Todos usamos este término alguna vez, pero cuando pasas durmiendo todos los miércoles sin voluntad de hacer nada mas que esperar que el día termine para seguir durmiendo, creo que no hay más que decir.
No es autocompasión, sólo honestidad. Perdiendo mucho, en todos los sentidos, he aprendido y eso ya es una ganancia: que el amor no es una persona sino un estado de ánimo, que no eres tan chingón como piensas o mucha gente te hace creer. Y en este momento había escrito tantas y tantas cosas que simplemente mi mente se ha saturado y me he quedado en azul, como la estúpida pantalla de la compu. Quiero sacar tantas cosas de mi sistema pero ya no quiero pensar en lo que me ha lastimado. En nada ni en nadie. Lamento que mucha gente haya sufrido mi abandono, pero que otra, por el contrario, no se haya alejado y que mucha más me haya permitido entrar en su vida aunque no haya sido en las mejores condiciones. Quiero perderme en el fin del mundo y eso es lo que pronto realizaré. Sola, yo y mi iPod, que ha musicalizado todos mis llantos y las alegrías de un amor distante pero cercano, de decisiones que sin pensarlas me transformaron por completo asumiendo sus riesgos. Quisiera encontrar en ese viaje un motivo para no volver atrás. Si pasa, se los diré.
Tengo claro el día en que perdí el control de mi vida durante este año… y quiero tener claro cuando lo vuelva a retomar. Entiendo que tuvo que ser así para que pasen las cosas buenas que están asomando la cabeza. Será pronto, lo sé. Viene en forma de un nuevo proyecto en el que sueño y en el que voy a poner todas energías que perdí en una vuelta prohibida; con viejos amigos y nuevas ideas, donde nos propondremos hacer realidad eso de “no es más grande el que más espacio ocupa sino el que mayor vacío deja”. Y también se ha personificado en quienes, pese a sus propias historias, tragedias y felicidades, no han dejado que me caiga. Han dicho Los Tres (una de esas cosas que lograron mantenerme viva, en paz efímera, en pie, sonriendo a veces): “el destino me salvará a su vez de la abulia que prometió volver”. Y en una cosa que hace tam tam tam…
Debo tomar aire, un trago de agua, ajustarme los lentes. Que el frío reactive mis sentidos. Cerrar y abrir. Desheredar. Arrendar. No fallar. Seguir amando intensamente. Barrer el sol. Dejar de estar entre la espada y la pared. Ir a una ciudad diferente a recordar que debo acordarme de olvidar que me olvidaste.
En un momento me convertí en un desatino que no pienso sostener más. Si has leído esto y me has comprendido y aún así me quieres, aprecias, estimas, valoras, etc… es el mejor regalo que me pudiste dar en estas fechas. Y no necesito más. Bueno, quizá sí: una palabra de respuesta y de saber que esto vale la pena.
Pásenla chido en este año que viene. Que yo aplicaré la máxima de hacerlo yo misma.

5 comments:

Frodo said...

Pues felicidades Cecy.

Que el año que viene sea mucho mejor cada día.

Un hobbit navideño

Anonymous said...

Ceci:

Gracias por las felicitaciones, gracias por no olvidar. Este año te he soñado varias veces, ahora se por qué. Eres fuerte y eres determinante, lo que quieras es tuyo. Te mando un abrazo y un beso grandes. Por cierto, ya tienes un pedacito de tierra que es nuestro y es tuyo para que vengas a guardarte cuando así lo quieras.

Atte. Adrián de la Tejera Vázquez de Amilpas.

Anonymous said...

Jovencita... el año que pasó pudo ser malo, pero su post parece anunciar que usted aprendió las lecciones que el dentino le puso enfrente y que este año seguro le da la cara al mundo!... suerte en lo que te pronpongas y los mejores deseos!

G.

Darth Tater said...

Tal vez la teoría de mi hermana sea cierta: que los años impares son malos para todos... así pues, esperemos con ansia que el 2008 sea de-lo-me-jor!
Un abrazo virtual!!!!!

Dantés said...

Llego un poco tarde por andar rolando en la vida de la misma manera que tú. Hay veces que por poco uno ya no la cuenta... pensaba que el año había sido pésimo también para mí pero haciendo el recuento de los daños resulta que hubo algo mucho más importante que lo demás, pese a todo: consolidar amistades y re-conocerme. No puedes negar que el conocimiento que adquiriste sobre ti misma, te hará crecer y evolucionar mucho más rápido que antes.
Te mando un fuerte abrazo, no olvides que para muchas personas sí importas.