Fueron dos días, pero significaron un compás de felicidad que necesitaba. De sentirme querida y saberme gustada... De platicar de tanto como si nos conociésemos de toda la vida, compartir ciertos gustos y reír por las diferencias. De sentir cómo los labios de alguien aún pueden hacerte creer cosas, y entender, de nuevo por qué estás vivo... Pronto, quizá nunca, no lo sé, iré a ver las nubes de arriba, y a sentarme en el cofre de mi coche a contemplar si realmente regresará o sólo fue un pestañeo sin recuerdos....
8 comments:
pero nos gusta esa sensación, puede ser muy doloroso y aún así, si tenemos suerte eso volverá a sucedernos y aunque tan solo fue por un momento te sentiste... "bien" o bueno esa es mi opinión, pero tal vez me equivoco, saludos
wow, niña!
Es decir... ¿si te aventaste?
Írenlaaaaa.
Vientos.
Frodo te felicita.
Bien! Momentos de felicidad, me alegro por ti! Besos.
Sopas. Cuánto misterio.
Me gustó cómo ilustraste tu post, sobre todo la última imagen.
ke lindo post.. me llego porque mi viejo vino a visitarme unos diitas y se acaba de ir :( buuu
A mi tambien se me hizo lindo tu post. Algo melancólico también... Creo ke esos pekeños momentos valen mucho la pena
¡Qué bonito post!
Y sí, esos momentos valen la pena ser vividos, no importa lo breves que sean.
Saludos ^^
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