Se supone que este post era para explicar mi egoproyecto de catarsis de un mes, para celebrar, conmemorar y condolerme de dejar los veintes y llegar como cuaderno nuevo a los treinta.
Se supone.
Pero el día y sus realidades escupieron otro tipo de discurso. Uno lleno de tristeza por la ejecución de un compañero de trabajo en Gómez Palacio, Durango. De recordar que esto no es un juego y que esta guerra de crimen organizado, con sus daños directos y colaterales, nos está consumiendo.
Y de que el sentido común es tan escaso, tan poco común, que duele verlo aparecer y dar la vuelta a la esquina, mientras te quedas con tu entripado.
Bueno. Mi pesimismo se reduce a una cosa, a lo importante. Sé (aunque espero que la realidad me dé otra bofetada y me equivoque) que quienes levantaron de su propia casa, arrastraron, torturaron, balearon y echaron al canal de riego a Eliseo, vivirán alegremente en su puta impunidad.
Se supone que aquí debería venir la corrección y que se sepa algo, pronto. Certero. Contundente y con consecuencias de algo que el lugar común llama justicia.
Se supone.
2 comments:
Esta noticia me deja sin palabras. A veces sinceramente no entiendo a la raza humana...
cuidate:)
Por eso al salir de mi casa pido por Ti y por todos mis compañeros...
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