El frío es la onda. El calor, hasta cierto grado. La lluvia y yo no nos llevamos del todo bien, porque las dos somos melancólicas y polos iguales chocan.
Además, la pendejez se activa en el DF cuando caen unas cuantas gotas de lluvia.
Definitivamente los mejores días son los de otoño, cuando hay un sol esplendoroso, pero el viento te cala y te despeina.
29.5.09
28.5.09
30 datos inútiles (I)
Hoy empieza esta serie que no tiene otro propósito que aplicar eso que bien apuntó Benedetti: "el olvido está lleno de memoria".
Como dice Sanz, "hay cosas muy tuyas/que yo no comprendo/y hay cosas tan mías/pero es que yo no las veo".
Sin dejo de redención ni autocrítica ni complacencia. Puro regocijo ridículo, quizá.
Pero mío, pues. Y en la recta final hacia los 30.
Dato 1. Dame gelatina en forma de oso rojo; una paleta de caramelo con palo de papel o un helado de limón con chocolate y me harás feliz. Pero si quieres en verdad regocijarme, dame una gelatina de papelito, de jerez, de las que venden en los carritos afuera de las clínicas del IMSS o en la esquina de Balderas y Artículo 123.
Como dice Sanz, "hay cosas muy tuyas/que yo no comprendo/y hay cosas tan mías/pero es que yo no las veo".
Sin dejo de redención ni autocrítica ni complacencia. Puro regocijo ridículo, quizá.
Pero mío, pues. Y en la recta final hacia los 30.
Dato 1. Dame gelatina en forma de oso rojo; una paleta de caramelo con palo de papel o un helado de limón con chocolate y me harás feliz. Pero si quieres en verdad regocijarme, dame una gelatina de papelito, de jerez, de las que venden en los carritos afuera de las clínicas del IMSS o en la esquina de Balderas y Artículo 123.
27.5.09
Eliseo y el sentido común
Se supone que este post era para explicar mi egoproyecto de catarsis de un mes, para celebrar, conmemorar y condolerme de dejar los veintes y llegar como cuaderno nuevo a los treinta.
Se supone.
Pero el día y sus realidades escupieron otro tipo de discurso. Uno lleno de tristeza por la ejecución de un compañero de trabajo en Gómez Palacio, Durango. De recordar que esto no es un juego y que esta guerra de crimen organizado, con sus daños directos y colaterales, nos está consumiendo.
Y de que el sentido común es tan escaso, tan poco común, que duele verlo aparecer y dar la vuelta a la esquina, mientras te quedas con tu entripado.
Bueno. Mi pesimismo se reduce a una cosa, a lo importante. Sé (aunque espero que la realidad me dé otra bofetada y me equivoque) que quienes levantaron de su propia casa, arrastraron, torturaron, balearon y echaron al canal de riego a Eliseo, vivirán alegremente en su puta impunidad.
Se supone que aquí debería venir la corrección y que se sepa algo, pronto. Certero. Contundente y con consecuencias de algo que el lugar común llama justicia.
Se supone.
Se supone.
Pero el día y sus realidades escupieron otro tipo de discurso. Uno lleno de tristeza por la ejecución de un compañero de trabajo en Gómez Palacio, Durango. De recordar que esto no es un juego y que esta guerra de crimen organizado, con sus daños directos y colaterales, nos está consumiendo.
Y de que el sentido común es tan escaso, tan poco común, que duele verlo aparecer y dar la vuelta a la esquina, mientras te quedas con tu entripado.
Bueno. Mi pesimismo se reduce a una cosa, a lo importante. Sé (aunque espero que la realidad me dé otra bofetada y me equivoque) que quienes levantaron de su propia casa, arrastraron, torturaron, balearon y echaron al canal de riego a Eliseo, vivirán alegremente en su puta impunidad.
Se supone que aquí debería venir la corrección y que se sepa algo, pronto. Certero. Contundente y con consecuencias de algo que el lugar común llama justicia.
Se supone.
25.5.09
18.5.09
Dedos morados
Como un racimo de uvas, los pobres...
Sólo puede ser una señal de que debo levantarme después de haber caído al suelo.
Duele, pero hay que hacerlo.
No queda de otra. El amoratamiento ya pasará.
Sólo puede ser una señal de que debo levantarme después de haber caído al suelo.
Duele, pero hay que hacerlo.
No queda de otra. El amoratamiento ya pasará.
14.5.09
Rain
Fue la primera lluvia de la temporada. Y no es momento de escribir sobre los estragos que causará. Decidí que fuera mi noche; para caminar entre los vagos que buscaban guarecerse a la entrada del metro Juárez. Para leer sin prisa sobre la huída que la muerte significó para Antonio Vega. Para toparme de frente con LaChapelle y su luminosidad en un parabús que, a su vez, era la única luz en derredor. Y percibir en los ojos cansados y abandonados de quienes apenas van a la mitad del camino de vuelta a casa paz y abandono, preocupación por querer dormir. Una pizzería abierta a medianoche. Las calles mojadas, las farolas reflejadas en los charcos. Esta noche era mucho más oscura que muchas y el alumbrado público cumplió con más afán su labor. Anoche no hubo pelota para Bonita. Ella tomó su tren y yo mi cámara. Caminamos no muy lejos, a la plaza de Coyoacán y en el camino la lluvia, las farolas y la oscuridad, en su perfecto contraste, dotaron de belleza a puertas, ventanales, herrería y flores... pero sólo faltaba una cosa: el vacío. Que toda esta bulliciosa plaza fuera para mí y mi perra con sus pequeñas intromisiones. Sonó Lou Reed con Perfect Day en mis oídos; justicia musical. Esto ha valido la pena y retratarlo en su fugaz locura es por lo que no estoy autorizada aún para meterme entre las cobijas y volver a enchufarme con la odiosa rutina... En mi propia jornada de vuelta, hasta los más pequeños detalles en las paredes me sobresaltaban la mirada. Cosas que he visto todas mis mañanas. Pero ahora, en el mejor tiempo del día, son más estéticas.
Lo que puede hacer la primera tormenta del casi verano. ¿Será un aviso de otro tiempo?
Lo que puede hacer la primera tormenta del casi verano. ¿Será un aviso de otro tiempo?
8.5.09
4.5.09
Sunny flu
Es complicado verle un lado bueno a esto. Pero creo que lo ha tenido.
Momentos tranquilizadores, noches calurosas de viento y silencio absoluto.
Volver a lo básico, una noche con los amigos escuchando música y repartiendo recuerdos en discos compactos.
La paz de una ciudad. El transporte casi vacío, pese a los ojos que transmiten preocupación.
Esto terminará en unos días, para bien.
Para mal además.
Lo disfruté, sí...
Ya habrá tiempo de reflexionar y de hacer el balance.
Momentos tranquilizadores, noches calurosas de viento y silencio absoluto.
Volver a lo básico, una noche con los amigos escuchando música y repartiendo recuerdos en discos compactos.
La paz de una ciudad. El transporte casi vacío, pese a los ojos que transmiten preocupación.
Esto terminará en unos días, para bien.
Para mal además.
Lo disfruté, sí...
Ya habrá tiempo de reflexionar y de hacer el balance.